re-presentante

Más bien, en todo «yo represento» el yo representante está correpresentado de una manera mucho más esencial y necesaria, como aquello en dirección de lo cual, volviendo a lo cual y ante lo cual es puesto todo lo re-presentado. Para ello no es necesario que me dirija y me vuelva explícitamente hacia mí, hacia el que representa. En la intuición inmediata de algo, en todo hacer presente algo, en todo recuerdo, en toda expectativa, lo re-presentado en esos diferentes modos por medio del representar me es representado, es puesto ante mí, de manera tal que yo mismo no me vuelvo explícitamente objeto del representar pero, sin embargo, en el representar objetivo y sólo por su intermedio, estoy remitido a «mí». En la medida en que todo re-presentar remite el objeto que se ha de re-presentar y el objeto representado al hombre re-presentante, el hombre re-presentante resulta «correpresentado» de esa manera peculiar y poco llamativa. 2596 Heideggeriana: NiilismoEuropeu

Pero esta caracterización del re-presentar por la que en él se «co»-re-presentan «conjuntamente» el representar mismo y el «yo» representante, sigue siendo equívoca hasta tanto no destaquemos de manera más precisa lo esencial de lo que aquí todo depende. Puesto que en todo representar es al hombre re-presentante a quien se remite lo re-presentado de ese re-presentar, el hombre representante se ha copresentado en todo representar no con posterioridad sino de antemano, en la medida en que él, el re-presentante, lleva en cada caso ante sí a lo re-presentado. Puesto que el hombre re-presentante ya ha comparecido dentro del re-presentar junto a lo re-presentado, existe en todo re-presentar la posibilidad esencial de que el representar mismo se lleve a cabo dentro del círculo visual del que representa. Que el representar y el re-presentante sean co-representados en el re-presentar humano no quiere decir, en verdad, que el yo y su re-presentar se encontraran, por así decirlo, fuera del re-presentar como objetos diferentes de este representar y, con posterioridad, se integraran en el entorno de lo re-presentado. En verdad, la equívoca formulación de que el representante y su representado son co-representados en todo representar expresa precisamente la pertenencia esencial del re-presentante a la constitución del re-presentar. 2598 Heideggeriana: NiilismoEuropeu

Tenemos aquí el ejemplo más palpable del solapamiento de un nuevo comienzo del pensar metafísico con el pensar anterior. Esto es lo que tiene que constatar una descripción historiográfica de los contenidos y los modos doctrinales de Descartes. Por el contrario, la meditación histórica sobre el preguntar en sentido propio tiene que insistir en pensar en sus proposiciones y conceptos el sentido querido por Descartes mismo, aunque para ello fuera necesario traducir en otro «lenguaje» sus propios enunciados. Sum res cogitans no quiere decir, pues: soy una cosa que está equipada con la propiedad de pensar, sino: soy un ente cuyo modo de ser consiste en el representar, de modo tal que ese re-presentar pone también en la representatividad al re-presentante mismo. El ser del ente que soy yo mismo, y que es en cada caso el hombre en cuanto tal, tiene su esencia en la representatividad y en la certeza que le corresponde. Pero esto no significa: yo soy una «mera representación», un mero pensamiento y nada verdaderamente real; sino que significa: la consistencia de mí mismo en cuanto res cogitans consiste en la segura fijación del representar, en la certeza conforme a la cual el sí mismo es llevado ante sí mismo. Pero puesto que el ego cogito, el «yo represento», no está tomado como un proceso aislado en un yo separado, puesto que el «yo» está comprendido como el sí mismo hacia el que el representar en cuanto tal se retrotrae por esencia, siendo así lo que es, por eso el cogito sum dice siempre esencialmente algo más. El ser del que representa, asegurado en el representar mismo, es la medida para el ser de lo representado, tomado en cuanto tal. Por ello, todo ente se mide de acuerdo con esa medida del ser, en el sentido de la representatividad asegurada y que se asegura a sí misma. 2641 Heideggeriana: NiilismoEuropeu

Qué quiere decir conocer para Nietzsche? ¿De qué modo ve de antemano la relación re-presentante del hombre respecto del mundo? ¿Es el conocimiento un proceso en el interior del ser viviente de especie racional, ser viviente al que llamamos hombre? Si sí, ¿qué sucede en este proceso? Acaso en él y por su intermedio se reciben y recogen, por así decirlo, imágenes del mundo circundante, para después trasladarlas e introducirlas en el alma y el espíritu, con lo que el conocimientos sería una especie de transcripción y copia de la realidad? ¿O para Nietzsche el conocer no es un conocer de este tipo? Su respuesta a esta pregunta, no formulada de modo explícito, pero implícitamente planteada, es la siguiente: «No “conocer”, sino esquematizar, imponer al caos tanta regularidad y tantas formas como para satisfacer nuestra necesidad práctica.» (n. 515; marzo junio de 1888) 6659 Heideggeriana: VontadePoder

Comprendida de antemano como rasgo fundamental del re-representar, de la re-praesentatio. Reflexión es retro-flexión [Rückbeugung] y, en cuanto tal, la presentación de lo presente llevada a cabo propiamente; propiamente: es decir, de manera tal que lo presente es remitido al re-presentante. El representar de lo representado que se retro-flexiona, se re-pone, es decir se-remite-a-sí-de-antemano, representar en el cual lo representado se representa y es en cuanto tal y cual. El qué mismo en su mismidad y su estar puesto, en su constancia. 8055 Heideggeriana: HistoriaSer